¿Por qué el interior de los humidores debe ser de cedro?

El acabado exterior de los humidores tiene un sinfín de posibilidades: maderas naturales, barnizadas, recompuestas, raíces, lacados en una infinidad de colores… Todo depende del gusto de cada uno o de la decoración de la estancia donde lo quiera ubicar. Sin embargo, es primordial que el interior de los humidores sea de madera de cedro.

La madera de cedro que se emplea en el revestimiento de los humidores procede de dos especies diferentes, conocidas como cedro español, rojo o americano (Cedrela Odorata) y cedro bossé. Ambas son maderas tropicales muy adecuadas para ambientes con elevados niveles de humedad, como los del humidor, y se mantienen muy bien en esas condiciones debido a su origen tropical.

Fundamentalmente, la madera de cedro es idónea para recubrir el interior de los humidores por las siguientes razones:

• Regulación de la humedad: tiene la capacidad de absorber y liberar humedad de manera equilibrada, de manera que ayuda a mantener una humedad constante dentro del humidor. Esto es crucial para preservar la calidad y frescura de los cigarros.
• Propiedades aromáticas: el cedro posee un aroma natural que realza el sabor de los cigarros. Este aroma complementa las notas del puro sin afectar negativamente o comprometer sus sabores.
• Resistencia a plagas: contiene aceites naturales que repelen insectos y plagas, como los escarabajos del tabaco (Lasioderma Serricone), que pueden dañar los cigarros. Así, resulta también un perfecto escudo para los cigarros que se conservan en el humidor.
• Durabilidad: se trata de una madera resistente y duradera, lo que hace que sea una buena opción para el interior de los humidores y asegura una larga vida útil del mismo.

  

Especies de madera de cedro para el interior de los humidores

El cedro americano está ampliamente distribuido a lo largo de América tropical, formando parte de la flora nativa de la mayoría de los países latinoamericanos (a excepción de Chile). De color entre marrón rosado y rojo claro con la albura más clara, desprende un gran aroma.

Sin embargo, también posee mucha resina, lo cual tiene un lado positivo y otro negativo. La parte buena es que la resina aporta buenos aromas al humidor y, por lo tanto, al cigarro. El lado malo es que, si el humidor no se abre periódicamente o se mantiene mucho tiempo cerrado, la resina puede brotar, por lo que se dificulta su uso a gran escala.

La segunda especie de madera más empleada en los humidores, conocida como cedro bossé, procede del África tropical y algunos países de América del Sur. Su madera es algo menos olorosa que la del cedro americano, también es más clara y no contiene tanta resina. Esa menor cantidad de resina la sitúa como mejor opción para el interior de los humidores hechos a gran escala.

En Humidores Wacota empleamos, sobre todo, la madera de cedro bossé porque, además de poseer las características de durabilidad, resistencia a plagas, regulación de la humedad y propiedades aromáticas, nos aseguramos de que la resina no aparece tanto en los humidores con el paso del tiempo.

Fabricamos en cedro bossé tanto las paredes interiores, como las baldas, los cajones y las bandejas extraíbles. En todo caso, si el cliente desea que empleemos madera de cedro español o americano, lo hacemos siempre que acepte los posibles problemas que pueda ocasionar su uso, como la posibilidad de que rebrote su resina interior.